Presentamos “Iracundia” del joven poeta venezolano Angel Borges. Se trata de un compendio de ocho sonetos atrabiliarios que trasladan al subtrópico y al siglo XXI una composición poética en desuso. Homenaje a Quevedo y a tantos otros escritores de la lengua que, a lo largo de los siglos, expresaron en verso las dichas y desdichas humanas. La ironía, la agudeza, la crítica permean versos endecasílabos que tejen un mapa de frustraciones. La sinceridad se descarna hasta los huesos; nos deja su risa-calavera.
Compartimos un soneto del conjunto:
Carnavales lluviosos, 2022
¡Demontres! ¡Retornó la payasada!
Festejo, bullaranga, ¡nadería!
Y sale a disfrutar la romería,
con máscaras y murgas. « ¡Qué gozada!».
La lluvia apareció como si nada.
El centro de la plaza humedecía,
y cerca, la tarima difundía
berridos de un idiota. ¡Qué trastada!
Boñiga, cochinera, ¡mugrerío!
En circo despilfarran lo que es mío,
a bien del guacamayo bandolero.
El ruso bombardea desalmado.
El otro lo defiende apasionado,
¡y deja mi bolsillo sin dinero!
A continuación Borges nos responde a algunas preguntas sobre su trabajo:
1) Es inevitable al leer “Iracundia” remitirnos a las “Gracias y desgracias del ojo del culo” de Quevedo. ¿Por qué escribir sonetos en el siglo XXI?
“El soneto es un tipo de composición con el cual siento mucha afinidad. Digamos, heredé la capacidad de escribirlos, aunque también la práctica me ha permitido mejorar. Actualmente, es necesaria la escritura de sonetos (entre otros tipos de composición lírica de corte clásico), primero, como homenaje a esos poetas que lo emplearon durante su tiempo; segundo, para manejar el estilo y familiarizarnos con sus variantes. Quizá resulte engorroso para muchas personas el tema de la rima, y, sobre todo, el metro. Pero es toda una aventura aprenderlo”.
2) La ira, lo escatológico: ¿a qué se debe esa elección temática?
“La escritura me ha permitido drenar. Gracias a las letras he podido soltar; librarme de situaciones y elementos desagradables que los días me han impuesto. Y esto de la escatología viene dado porque, dichos eventos y seres insoportables, motivos de mi desdén, los considero grandes patrimonios de la hez”.
3) ¿Qué nuevos proyectos de escritura rondan tu cabeza?
“Tengo reservada una obra narrativa, El formidable rostro del presagio, relatos escritos entre 2020 y principios de 2021, en cuyos párrafos hice uso de la métrica. A su vez, La voz de las tinieblas, un conjunto de relatos y microrrelatos que se encuentra en la búsqueda de una casa editorial”.
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